El amor, el sentimiento humano más intenso, ha cautivado a hombres y mujeres desde el comienzo de la historia y ha sido uno de los temas centrales de la literatura, el cine y la música. Sin embargo, a pesar de ser un sentimiento inconfundible (las mariposas en el estómago, el ritmo acelerado del corazón…), el amor es una de las sensaciones más dificiles de describir.
Es hielo abrasador, es fuego helado. Es herida que duele y no se siente. Un soñado bien, un mal presente. Es un breve descanso muy cansado…
Francisco de Quevedo
Componentes del amor según Sternberg
El psicólogo Robert Sternberg expone en su libro La psicología del amor una concepción triangular del amor que consta de tres componentes básicos: intimidad, pasión y compromiso. El nombre de «triangular» se debe a que cada componente se encuentra en los vértices de un triángulo.
Intimidad
La intimidad supone un sentimiento de proximidad, comunicación y vinculación afectiva en la relación. Desarrollar la intimidad significa compartir experiencias de calidez en la relación amorosa, promover el bienestar, experimentar la felicidad juntos, fomentar el respeto y la comprensión mutua, poder compartir las posesiones, contar con el otro en momentos de necesidad, reconocer el valor de la pareja en su propia vida, dar y recibir apoyo, tener una comunicación íntima y, en definitiva, experimentar felicidad juntos.
Pasión
La pasión es la fuerza de la atracción física y emocional. Este componente se refiere a los impulsos que conducen al romance, la atracción física, la consumación sexual y similares en una relación amorosa. Aunque las necesidades sexuales pueden formar la parte principal de la pasión en muchas relaciones, otras necesidades (como las de autoestima, afiliación con otros, dominación-sumisión a otros y autorrealización) también pueden contribuir a la experiencia de la pasión.
Suele vivenciarse como algo inestable y produce una visión más optimista del mundo y una generosidad sin condiciones. No sólo constituye la excitación sexual, sino también emocional. Son los deseos de estar con nuestra pareja y creer que nadie nos hará felices de forma semejante.
Compromiso / decisión
El compromiso/decisión del amor consta de dos aspectos, uno a corto plazo y otro a largo plazo:
- El aspecto de corto plazo es la decisión de que uno ama a alguien.
- El aspecto de largo plazo es el compromiso de mantener ese amor.
Estos dos aspectos no van necesariamente juntos, ya que la decisión de amar no tiene por qué implicar un compromiso con ese amor, y el compromiso tampoco tiene que implicar una decisión. Muchas personas están comprometidas con el amor de otra persona sin necesariamente admitir que la aman o están enamoradas de esa persona. Sin embargo, la mayoría de las veces la decisión precederá al compromiso.
Este componente significa esforzarse por cuidar y mantener el amor para que evolucione y no desaparezca por desinterés o aburrimiento. Implica decisión de querer al otro y la voluntad expresa de mantener esa relación y compromiso social.
Mientras que la intimidad y el compromiso son relativamente estables, la pasión es inestable y puede fluctuar de forma imprevisible.
Tipos de amor según Sternberg
Si se toman todas las combinaciones posibles de los tres componentes del amor, se obtienen 8 tipos de amor diferentes que forman la base para la clasificación del amor según Sternberg.
Sólo intimidad: Gustar
El sentimiento de «gustar» resulta cuando uno experimenta solo el componente de intimidad en ausencia de los demás componentes. El término «gustar» se usa aquí en un sentido no trivial, no simplemente para describir los sentimientos que uno tiene hacia conocidos casuales y transeúntes en la vida. Más bien, se refiere al conjunto de sentimientos y experiencias en las relaciones que son de verdadera amistad. Uno siente cercanía, unión y calidez hacia el otro, sin pasión intensa ni compromiso a largo plazo.
Solo pasión: Encaprichamiento
El encaprichamiento es “amor a primera vista”. En general, este amor se vuelve hacia la obsesión de que la pareja sea amada como un objeto idealizado y no como él mismo. El encaprichamiento resulta de la excitación apasionada en ausencia de los componentes de intimidad y compromiso/decisión. Los encaprichamientos suelen ser fáciles de detectar, pueden surgir casi instantáneamente y disiparse con la misma rapidez en las circunstancias adecuadas. Suelen caracterizarse por un alto grado de excitación física y mental.
Varios problemas importantes tienden a estar asociados con el encaprichamiento:
- La primera es que se basa en una idealización de un individuo. No es sorprendente que los encaprichamientos se desvanezcan cuando una relación comienza y se contrastan las expectativas fantasiosas e idealizadas (amor platónico) con la realidad. La mejor cura para el enamoramiento es la oportunidad de conocer muy bien el objeto del enamoramiento, para que la realidad tenga la oportunidad de competir con la idealidad. La otra cura es convencerse de que uno no tiene absolutamente ninguna esperanza de alcanzar el objeto de su enamoramiento.
- El segundo problema es que los encaprichamientos tienden a ser obsesivos. Uno puede ser devorado o consumido por el amor, de modo que termine consumiendo tiempo, energía y motivación de otras cosas mñas importantes en la vida. El carácter obsesivo del enamoramiento también puede hacer que el objeto del enamoramiento se sienta incómodo, ya que se da cuenta de que el amor es más una proyección de las necesidades del amante que un verdadero interés en el amado.
- El tercer problema es que las relaciones suelen ser asimétricas. La investigación indica que cuanto mayor es el grado de asimetría, más angustia siente una relación. Debido a que el enamoramiento se basa generalmente en la idealización de una persona, tales relaciones son particularmente susceptibles a la angustia.
Sólo compromiso / decisión: Amor vacío
El amor vacío es el resultado de alguien que toma la decisión de amar a otro (se compromete a amarle) cuando no hay intimidad ni pasión. Es el tipo de amor que uno encuentra a veces en relaciones estancadas que han estado juntas durante años, pero que han perdido la participación emocional mutua y la atracción física que una vez los caracterizó. A menos que el compromiso con el amor sea fuerte, ese amor puede desaparecer cuando un miembro de la pareja rescinde su decisión por comprometerse.
Aunque, en nuestra sociedad, el amor vacío ocurre con mayor frecuencia como la etapa final de una relación a largo plazo, en otras sociedades, el amor vacío puede ocurrir como la primera etapa de una relación a largo plazo. Por ejemplo, en sociedades donde los matrimonios son concertados, los cónyuges pueden comenzar con el compromiso de amarse y tener que tomar las cosas a partir de ahí. Por tanto, el amor vacío no tiene por qué ser terminal en las relaciones.
Sin embargo, cuando todo lo que queda en una pareja es el compromiso, y los otros elementos se han extinguido, es muy difícil restaurar el amor. A menudo, las parejas esperan años para que la «magia» regrese, pero acaban decepcionandose y descubriendo que se ha ido para siempre: nunca más pueden sentir intimidad o pasión el uno por el otro.
El amor vacío, como cualquier otro tipo de amor, puede ser unilateral. Uno de los miembros puede conservar sentimientos genuinos de cercanía y vínculo con el otro, mientras que el otro se siente sólo comprometido con el primero. Tales relaciones asimétricas pueden ser particularmente difíciles debido a la culpa adicional que siente el cónyuge menos involucrado al no poder corresponder a los sentimientos del cónyuge más involucrado.
Intimidad + Pasión: Amor romántico
El amor romántico se deriva de la combinación de los componentes de intimidad y pasión. En esencia, consiste en el sentimiento de «gustar» con un elemento añadido de atracción (sea del tipo que sea). Desde este punto de vista, los amantes románticos se sienten atraídos el uno por el otro tanto física como emocionalmente. Sin embargo, el compromiso no es una parte necesaria del amor romántico. Los amantes pueden darse cuenta de que la permanencia es improbable, imposible o simplemente un problema que se abordará en el futuro. Una historia de amor de verano, por ejemplo, puede ser muy romántica, pero sin ninguna posibilidad real de durar más allá del verano.
Esta visión del amor romántico parece ser similar a la que se encuentra en palabras clásicas de la literatura, como Romeo y Julieta. Algunos autores sostienen que el amor romántico no se diferencia del enamoramiento. Sin embargo, es importante distinguir entre los dos. Algunos enamoramientos nunca pasan de esa etapa, pero otros sí. Dos miembros de una pareja inicialmente atraídos el uno por el otro por razones puramente físicas pueden llegar a darse cuenta de que tienen mucho más en común que solo la atracción física; o por el contrario, pueden llegar a darse cuenta de que no lo hacen. Además, el amor romántico no tiene por qué comenzar con un encaprichamiento. A veces, en una amistad que se comienza a «gustar» se convierte en amor romántico cuando la pareja se atrae apasionadamente.
Intimidad + Compromiso/decisión: Amor compañero
El amor compañero resulta de la combinación de los componentes de intimidad y compromiso/decisión. Es esencialmente una amistad comprometida a largo plazo, del tipo que ocurre con frecuencia en los matrimonios en los que la atracción física (como fuente principal de pasión) ha disminuido.
La mayoría de las relaciones amorosas románticas que sobreviven, eventualmente se convierten en una relación amorosa de compañía: la pasión comienza a derretirse, pero la intimidad permanece. La pasión puede ser reemplazada con el tiempo por un compromiso profundo y a largo plazo. Los individuos y la pareja difieren en la medida en que están satisfechos con el amor que les hace compañía.
Algunas personas no pueden ser felices a menos que tengan algún tipo de pasión en sus vidas. Si se da este tipo de amor, estas personas serán infelices o buscarán asuntos externos “para mantener viva la llama”, o simplemente dejarán a su pareja para comenzar una nueva. Por supuesto, su nueva relación también puede eventualmente convertirse en compañera, en cuyo caso volverán a donde comenzaron cuando disolvieron la relación anterior.
Pasión + Compromiso/decisión: Amor fatuo
El amor fatuo resulta de la combinación de los componentes de pasión y compromiso/decisión en ausencia del componente de intimidad. Es el tipo de amor que a veces asociamos con Hollywood o con los noviazgos vertiginosos: una pareja se conoce un día, se compromete poco después y se casa poco después. Es famoso en el sentido de que un compromiso se realiza sobre la base de la pasión sin los elementos estabilizadores de la participación íntima (que lleva tiempo desarrollar).
El amor fatuo es muy susceptible a la angustia. Cuando la pasión se desvanece (como es casi inevitable), todo lo que queda es el compromiso, pero no es probable que sea un compromiso que haya crecido y se haya profundizado durante un largo período de tiempo. Más bien, es un compromiso que aún es joven y posiblemente superficial. De vez en cuando, existe la posibilidad de que la intimidad aumente, pero las expectativas con las que la pareja entra en la relación pueden obstaculizar en lugar de ayudar al desarrollo de la intimidad. Esperan un matrimonio hecho en el cielo, pero no se dan cuenta de lo que deben hacer realmente para mantener ese matrimonio. Basan la relación en la pasión y se decepcionan cuando la pasión comienza a desvanecerse. Se sienten defraudados (han obtenido mucho menos de lo que esperaban). El problema, por supuesto, es que negociaban demasiado de una cosa (pasión) y no lo suficiente de otra (intimidad).
Intimidad + Pasión + Compromiso: Amor completo
La consumación o el amor completo resulta cuando los 3 componentes están presentes. Es un tipo de amor por el que muchos de nosotros luchamos, especialmente en las relaciones románticas. Alcanzar el amor consumado puede ser difícil, pero mantenerlo es aún más difícil. No buscamos el amor consumado en todas nuestras relaciones amorosas, ni siquiera en la mayoría de ellas. Más bien, tendemos a reservarlo para aquellos amores que más significan para nosotros y que queremos hacer lo más completo posible.
Ausencia de todos los componentes: No-amor
El no-amor es simplemente la ausencia de los 3 componentes del amor. El no-amor caracteriza la mayoría de nuestras relaciones interpersonales, que son interacciones casuales que no participan del amor, ni siquiera de la amistad, de ninguna manera significativa. Por lo general, no esperamos mucho más de nuestros conocidos.
Si tienes curiosidad, puedes hacer este test y saber cuál es tu tipo de amor.
Bibliografía
- Alonso García, J. I (2008). Psicología Bachillerato. Madrid: McGraw Hill
- Sternberg, R. J. & Barnes, M.L. (1988). Tha psychology of love. Yale University Press
Me encanto la información, sobre todo el test..!!!